Por Edgardo Cabrera

Alberto Amaro se la está jugando en serio, quiere ser candidato al Senado y así lo dejó ver ayer durante su informe de labores que se convirtió en pre destape a la candidatura por el Frente Ciudadano por México.

Como se esperaba, el diputado local perredista llenó el Centro de Convenciones de la capital y atrajo a la plana mayor de su corriente, la Nueva Izquierda, empezando por Jesús Ortega (el “Chucho Mayor”), aunque también estuvieron Jesús Zambrano y otros miembros del CEN y del comité estatal.

A su acto también arribaron varios panistas y miembros del Movimiento Ciudadano, pero llamó en particular la atención la presencia de las panistas Aurora Aguilar y Minerva Hernández, a las que ve con agrado para ser compañeras de fórmula.

El perredista tapizó además el estado con propaganda relativa a su informe de labores con lo que aquellos que no lo conocían o no sabían de él ya lo tienen en su memoria.

Ya veremos si con esta campaña logra despuntar en las encuestas de cara a las definiciones, no perdamos de vista que hay plazos fatales que se deben cumplir, para empezar el próximo 14 de diciembre vence el término para que el Frente defina qué le toca a cada quien, algo que marcará el rumbo de los aspirantes a las candidaturas.

Frente empanizado

Aunque el propio dirigente estatal del PAN, Carlos Carreón, trató desestimar las declaraciones del perredista Alberto Amaro, quien se soltó de la lengua y ante reporteros adelantó la distribución de candidaturas en el Frente, lo cierto es que el oriundo de Papalotla no mentía.

Efectivamente ya existe un proyecto bastante avanzado del reparto del pastel dentro del Frente Ciudadano por México, así lo develó al cierre de la semana pasada el diario El Universal, luego de que tuvieran acceso a un documento filtrado por el propio PRD.

De dicho proyecto se desprende que el PAN lleva mano en el reparto al quedarse con 57 por ciento de los 300 distritos del país que serán concursados, es decir 172 candidaturas a diputaciones federales; el PRD 27 por ciento, hablamos de 82 abanderados; y MC 15 por ciento, es decir 46 candidaturas.

Para el Senado, de los 64 escaños de mayoría relativa el PAN se agandallaría 45, al PRD le tocarían 17 y Movimiento Ciudadano sólo 2.

En el caso particular de Tlaxcala el proyecto sí considera un reparto equitativo entre los 3 partidos para las candidaturas a las diputaciones federales, hablamos, y hasta donde sabemos que al PAN le darían el distrito I, al PRD el II y al Movimiento Ciudadano el III.

En relación al Senado, efectivamente la fórmula estaría conformada solamente por el PAN y PRD, sin embargo, a diferencia de lo que dijo Alberto Amaro, en la propuesta le estarían cediendo la cabeza de fórmula a los albiazules y los amarillos irían como compañeros de fórmula, sin embargo aún no acordaban las dirigencias nacionales la distribución por género.

El Frente tiene hasta el 14 de diciembre para presentar el convenio de coalición y decir cómo va el reparto, hablamos que están contrarreloj por lo que será cuestión de horas para que se despeje la incógnita, aunque todo parece indicar que al PRD le tocará varón y al PAN mujer.

Coscorrón

Tras más de 5 meses de incertidumbre el TEPJF validó el triunfo del priísta Miguel Ángel Riquelme en Coahuila.

La determinación inyecta nuevos bríos al PRI, sobre todo a escasos días de que se conozca el destape del candidato presidencial.

Con Coahuila y el Estado de México, sus mayores trofeos en 2017, los tricolores dejan ver que no están dispuestos a seguir perdiendo territorio y que su maquinaria, si en verdad se lo propone, puede ganar, ahí esta el caso Tlaxcala donde todos daban por muertos al PRI en 2016.