Por Alfredo González

Automóviles y pertenencias de trabajadores y vecinos de la zona donde se ubica la Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Vivienda (Secoduvi), la Unidad de Servicios Educativos y otras oficinas estatales y federales, se han convertido en presas fáciles de la delincuencia.

Y es que en últimos días, los amantes de lo ajeno han aprovechado la cercanía de una pequeña barranca que se encuentra aledaña a la zona de estacionamiento de las instituciones para hurtar autopartes y pertenencias personales para huir del lugar por este accidente geográfico hacia una calle adyacente al bulevar Beatriz Paredes.

Ante los hechos, las quejas de trabajadores y vecinos de las calles que han sufrido por la ola de robos se han multiplicado, siendo que vehículos oficiales de las distintas instituciones han sido presas de la delincuencia durante la noche pese a la existencia de vigilantes.

Los afectados pidieron se refuerce la seguridad en la zona, donde además agregaron la existencia de personas desconocidas y algunos supuestos pandilleros en la zona de quienes tienen la sospecha podrían ser responsables de algunos de los ilícitos.