El ajedrez del III
7 de noviembre - 2017

Por Edgardo Cabrera

En el III distrito las fichas comienzan a moverse en busca de refrendar el triunfo de hace 3 años, en el caso del PRI, o para apuntalar futuras aspiraciones políticas como los de Morena.

Por el PRI Carlos Augusto Pérez Hernández tiene un capital político nada despreciable, el mismo que sirvió para apuntalar en su momento a Ricardo García Portilla y posteriormente para sumarle votos a Marco Mena.

Ahora podría convertirse en conciliador de dos de los tres grandes grupos internos. Para empezar, el ex diputado se mantiene leal a Marco Mena desde la campaña del 2016, pero no está peleado con los marianistas representados por Ricardo García Portilla y Teodardo Muñoz, quienes podrían frenarlo en sus aspiraciones.

Sin embargo otra que podría subirse a la contienda por la candidatura es la actual diputada local Eréndira Cova, su principal bastión se encontraría en el poniente del estado y detrás traería el respaldo del tercer gran grupo del PRI, el de Beatriz Paredes, sin embargo a Cova le puede pesar su vínculo con Héctor Ortiz a quien sus correligionarios no le perdonan haber sido su suplente cuando fue diputado federal.

La Morena

En el caso de Morena, Lorena Cuéllar mantiene la misma estrategia que utilizó en la búsqueda por la gubernatura.

Según las temporadas se transforma, por ejemplo ya fue madrina de graduaciones escolares, de ferias y hasta de XV años, pero también se le vio promocionándose con la entrega de premios por concursos de ofrendas, sin dejar de lado las infaltables fotos al lado de personas de los sectores vulnerables o refritearse en Tribuna falsas noticias que ya fueron aclaradas.

Lo cierto es que al amarrar la dúplex en el pejepartido, Lorena parece realizar una competencia simplemente trotando, confiada en refrendar los votos de 2016 y ser arrastrada por el efecto AMLO, sabe que al ser diputada federal tiene la mitad del camino asegurado para volver a competir por la gubernatura.

Los enfrentados

Mientras que del lado del Frente Ciudadano, PAN-PRD y Movimiento Ciudadano no terminan en ponerse de acuerdo qué distrito le toca a cada quién.

Lo cierto es que deben sopesar su mayor rentabilidad electoral ya que el diputado local panista Juan Carlos Sánchez se ha metido en serio a la contienda por la candidatura.

Trabaja a ras de tierra, lo mismo está en reuniones partidistas que en la conformación de estructuras y hasta organizando torneos deportivos por medio de su marca: SAGA. Es de los panistas el más visible y con trabajo sin ninguna duda.

Pero por el otro lado Movimiento Ciudadano parece que no quiere ceder el distrito III a sus aliados, al menos esa fue la lectura que dejó Dante Delgado en su reciente visita al estado donde apapachó al ex candidato a la gubernatura Edilberto Algredo Jaramillo.

Todo indica que el partido del veracruzano no pretende quedarse sin nada en Tlaxcala donde panistas y perredistas en el plano local han dado por descontado el reparto de candidaturas a su socio en el plano nacional.

Papá e hija

En el caso del Panal todos piensan que la bola está cantada, que la familia Corona lleva mano para convertir a Sandra como abanderada luego de que hace 3 años su papá, J. Carmen, rasguñara el triunfo en el III distrito.

Lo cierto es que sus deslealtades y su mezquina campaña en contra de la cabeza del sector educativo (que constituye uno de los tres principales ejes rectores del gobierno de Marco Mena) les podría costar muy caro a la hora de las definiciones.

En una de esas podría salir como abanderado uno de sus contrarios al interior del mismo SNTE donde las pugnas por el poder sindical también están a la orden del día.