Por Alfredo González

Organizaciones de la sociedad civil por la defensa de los pueblos y la preservación de la cuenca Atoyac – Zahuapan, tienen lista su propuesta de saneamiento de esos cuerpos de agua y sus tributarios derivada de la recomendación 10/2017 que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dirigió en marzo pasado a instituciones del Gobierno federal, a los Gobiernos de Tlaxcala y Puebla, así como a las administraciones de diversos municipios de ambas entidades, por la violación a los derechos humanos a un medio ambiente sano, saneamiento del agua y acceso a la información en relación con la contaminación de los ríos Atoyac y Zahuapan.

La CNDH dio un plazo de seis meses a las autoridades que aceptaron la recomendación para conformar un Grupo Interinstitucional que diseñe un plan integral de limpieza, término que se vence el 12 de octubre y por lo tanto las asociaciones civiles han pedido ser tomadas en cuenta.

Se trata de la Coordinadora por un Atoyac con Vida, la Red de Jóvenes en Defensa de los Pueblos, el Consejo Ciudadano por la Dignificación de Ixtacuixtla, las Pastorales de Derechos Humanos y Social de la Diócesis de Tlaxcala, así como el Centro Fray Julián Garcés, cuyos integrantes a lo largo de tres meses previos realizaron un trabajo de difusión y reflexión colectiva a través de 80 talleres en las comunidades más afectadas por la polución, para generar una propuesta que además está respaldada por un grupo de científicos de la UNAM y de la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad, todo de alto prestigio reconocido.

Para presentar y discutir su planteamiento general, esas organizaciones convocaron al Foro Comunitario por el Saneamiento Integral de la Cuenca Atoyac – Zahuapan que se realizará el 7 de noviembre próximo, tentativamente en la Plaza Juárez de la capital del Estado, a partir de las 9:30 horas, informaron este miércoles en rueda de prensa varios de sus representantes.

La llamada “propuesta comunitaria” está integrada por seis puntos generales que tienen que ver con el necesario saneamiento de la cuenca, que incluye los cauces de los ríos, arroyos canales y zanjas; la restauración de los suelos en el lecho de los ríos y arroyos, en la ribera y en los terrenos aledaños a la zona federal; la prevención, control y monitoreo de la contaminación futura de la cuenca; diseño y aplicación de un Plan Emergente de Salud para quienes hoy están enfermos debido a la contaminación de la cuenca; el plan de saneamiento debe contar con recursos económicos suficientes para llevar a cabos todas sus acciones; y la aplicación de las correspondientes medidas para la reparación del daño ocasionado a las personas, las familias y las comunidades en su salud, economía, cultura y dignidad.

La recomendación 10/2017 fue dirigida a la SEMARNAT, a la CONAGUA, a la PROFEPA y a la COFEPRIS, a los Gobiernos estatales Puebla y Tlaxcala, así como a los municipales de Texmelucan, Huejotzingo, Tepetitla, Nativitas e Ixtacuixtla, en donde – calcularon – están en riesgo dos millones de personas por el agua residual vertida por miles de empresas industriales y autoridades municipales, que han generado daños irreversibles a la salud de la población y con un alta incidencia de enfermedades crónico degenerativas y daño genotóxico.

La rueda de medios estuvo encabezada, entre otros, por la Directora del Centro Fray Julián Garcés, Alejandra Méndez Serrano; el académico e investigador de la UNAM, Octavio Rosas Landa; y Arturo Olvera Rodríguez.