Anabel Alvarado, Mariano González, Rosalinda Muñoz y Ricardo García están en la baraja del PRI para competir por el Senado. Ahora resulta que “fueron mayoritarios” por el PRI!!!, para el PAN no cuentan el resto de las fracciones. De cara al proceso 2018, en el PT renovaron su dirigencia sin ninguna novedad

Por Edgardo Cabrera

Aunque el llamado del gobernador a los priístas fue a no distraerse y dejar de lado la promoción personal, ello no significa que no estén la mira los perfiles que serán enviados a la contienda del 2018.

Por el Senado son pocos los nombres y difícilmente se moverá la lista de los posibles, una primera opción sería una fórmula conformada por la actual secretaria de Gobierno, Anabel Alvarado y el diputado local Mariano González Aguirre.

La pareja sería altamente competitiva considerando que los marianistas se meterían de lleno a la contienda, y es que ya no es secreto el enfriamiento de la relación entre el grupo de Marco Mena y el del ex gobernador Mariano González.

Pero a la competencia por el Senado también se encuentran en la mira los diputados federales Rosalinda Muñoz y Ricardo García Portilla que forman parte del relevo generacional dentro del PRI.

Ahora bien, no perdamos de vista que la semana pasada durante la conmemoración luctuosa de Emilio Sánchez Piedras, el primer priísta del estado fue enfático al destacar que la suya es una nueva generación en la política local y que será, por tanto, alentada, de ahí que los candidatos al 2018 deberían formar parte de esa nueva camada.

Bajo esta premisa, difícilmente veremos a Beatriz Paredes impulsada para la competencia por la Cámara Alta, por lo que sabemos que la señora está intentando colarse en la lista plurinominal de su partido.

También no perdamos de vista que en ese mismo discurso, Mena llamó a la clase política a poner los pies sobre la tierra, es decir, no dejar de trabajar con las estructuras y mantener contacto directo con la población, algo que han olvidado algunos soñadores como el apizaquense José Luis Ramírez Conde y la sindicalista Blanca Águila quienes a su paso por los puestos públicos sigue dejando heridos y enemigos.

Bandazos azules

El PAN estatal y su bancada da bandazos tras su berrinche por la aprobación del Sistema Estatal Anticorrupción.

Ahora resulta que “fueron mayoritarios” por el PRI!!!, es decir, para el PAN el resto de las fracciones parlamentarias y partidos políticos no cuentan.

El asunto es muy simple, la iniciativa fue sometida al Pleno y ahí, en un ejercicio parlamentario y democrático, los azules fueron vencidos en los votos por lo que acusar mayoriteo es simplemente ridículo.

Pero no sólo lo anterior resulta ilógico, sino que en su desesperación y ante la falta del respaldo de sus homólogos para promover una controversia constitucional tiraron línea a los 10 alcaldes panistas para que en los cabildos rechacen la reforma y, para ser sinceros, dudo mucho que la decena de ediles cumplan el capricho de la dirigencia.

Para empezar, más de uno no trae los votos necesarios para imponer su voluntad en los cabildos y, por si fuera poco, al menos 2 alcaldes no seguirán órdenes de su dirigente por la sencilla razón de que su corazón están con el grupo antagónico a Carlos Carreón.

Cacicazgo en el PT

En eso del tinglado preelectoral de cara al proceso 2018, en el PT renovaron su dirigencia sin ninguna novedad.

Como suele ocurrir en ese partido, los mismos que controlan la cúpula estatal desde hace años solamente se rolaron las posiciones, Silvano Garay, por ejemplo, dejó la dirigencia pero sigue metido en la coordinadora estatal, amén de que impuso a su hija dentro de la estructura.

En tanto que el diputado Jesús Portillo asume la dirigencia, mientras que el resto de las carteras, incluidos los comités municipales, se los dividieron otros de sus allegados y personajes que han construido cotos de poder en algunas localidades como Reyes Ruiz en Apizaco, quienes se perfilan así como candidatos.