Chicaneada
29 de marzo - 2017

Carreón detenta la dirigencia estatal del PAN, por lo que su estancia no es producto de la casualidad como lo quiere hacer ver. En el PRD no cantan mal las rancheras, sus pugnas nacionales han contaminado los acuerdos estatales. En el PRI siguen a la expectativa de la toma de protesta de Florentino, podría ser aplazada de nuevo

Por Edgardo Cabrera

Vaya cinismo de Carlos Carreón quien detenta la dirigencia estatal del PAN en lo que parece un plan bien elaborado, por lo que su estancia no es producto de la casualidad, ni de los tiempos y menos de la voluntad de la militancia.

Es cierto, al existir un periodo electoral (en este caso extraordinario local) los órganos directivos no pueden ser renovados, de ahí que el ex funcionario federal justifica su inamovilidad del cargo.

Pero también es cierto que mañosamente Carreón y su camarilla no convocaron a la renovación desde inicio de año –cuando se le venció su periodo- y esperaron dos meses a que el Congreso local emitiera la convocatoria de las elecciones extraordinarias en comunidades para escudar su permanencia.

Y no sólo lo anterior, nos han confesado sus propios allegados que tienen la intención de perpetuarse hasta después del 2018 con la excusa de que no les dará tiempo la renovación dado que “son muy cortos” los lapsos para renovar la dirigencia ante el inicio del proceso electoral federal y local.

Es decir, estamos ante una auténtica chicana de los estatutos partidistas para no correr ningún riesgo y garantizar con ello el control financiero del partido así como la injerencia directa en el reparto de las próximas candidaturas a diputaciones locales y federales, así como a las senadurías.

A este paso y ante la terquedad de cicatrizar heridas y dejar de lado la disputa por el poder interno de los grupos, el panismo tlaxcalteca corre el riesgo de repetir la dosis de las elecciones de 2016 cuando perdieron todo.

La crisis amarilla

Pero en el PRD no cantan mal las rancheras, sus pugnas nacionales han contaminado los acuerdos estatales.

Como si el conflicto en la fracción del Senado no fuera suficiente, resulta que a más tardar el 7 de abril el CEN y su Consejo Nacional deberán emitir la convocatoria para renovar sus órganos de dirección, incluidos en los estados, de no hacerlo deberán dejar las cosas tal cual hasta que concluya el proceso electoral inmediato.

Sin embargo no hay acuerdos hasta el momento entre las 3 principales tribus que encabezan el partido (la de Jesús Ortega, los Bejaranos y Héctor Bautista), cada una tiene su propio plan de alianza con otras fuerzas, principalmente con el PAN o Morena.

De no llegar a buen puerto veremos una nueva fractura que los afectará directamente en sus intereses electorales a pesar de que en Tlaxcala existe un gran frente que viene impulsando un pacto de cara al 2018 entre las tribus mayoritarias que conforman Manuel Cambrón, Santiago Sesín, Alberto Amaro y los alcaldes en funciones.

Expectativa

En el PRI siguen a la expectativa de la toma de protesta de Florentino Domínguez como dirigente estatal, podría ser que de nuevo sea aplazada.

Aunque se tiene previsto que sea el domingo cuando venga Enrique Ochoa Reza, hasta ayer martes la cita no se tenía confirmada por posibles ajustes tanto en la agenda del líder nacional tricolor como del gobernador Marco Mena.

Por lo que se abrió una posible nueva fecha hasta el domingo 9 de abril.