Fidel Castro
29 de noviembre - 2016

ranulfo_rojas

Por Ranulfo Rojas Bretón

A los 90 años de edad muere uno de los personajes emblemáticos del siglo XX, líder de la Revolución Cubana y con un amplio reconocimiento por muchos aspectos.

He escuchado a varios decir: “la historia lo juzgará”, en realidad ya desde ahora muchos están haciendo juicios y con ello están haciendo el juicio de la historia. Como la historia se conforma con la participación de mucha gente y de muchas perspectivas, siempre habrá quienes hablen de él maravillas y también quien haga críticas muy duras. Cada uno tendrá sus propias razones y dará sus propios argumentos.

El juicio dependerá de quién lo haga y desde su propia experiencia respecto especialmente a su postura ante el comunismo o socialismo y su enfrentamiento contra el capitalismo. Los años que me tocó estudiar la secundaria, la preparatoria y la formación ya profesional estuvieron marcados por la presencia ideológica del socialismo y comunismo, las figuras que se exaltaban eran Lenin, Marx, Mao Tse tung, entre otras. En México la izquierda estaba muy ligada al pensamiento de la URSS y de China, muchos de los jóvenes soñaban con la posibilidad de tener una beca en Rusia, y en ese marco las figuras de Ernesto “Che” Guevara y Fidel Castro eran íconos de la juventud que se resistía al modelo del llamado “Imperialismo Yanqui”. Mucha gente hablaba maravillas del modelo cubano porque según su propaganda, no había pobreza, no había analfabetismo, tampoco había desempleo ni deserción escolar, no había vicios ni prostitución, todos tenían acceso a la salud, en fin, parecía que todo era jauja. Si hablamos del deporte, tendremos que reconocer que Cuba se convirtió en una potencia en el atletismo y se ubicaba en los primeros lugares del medallero en las olimpiadas

El modelo cubano que se conocía era admirado y propagado por muchos. Había en México personajes que se dedicaron a impulsar el modelo cubano, no había ferias de libros en los que los que no se vendieran libros como: Cuba Libre de Rius, El Capital de Marx, Dios y el Estado de Mijail Bakunin, Diez días que estremecieron el mundo de John Reed, entre una abundante bibliografía de ese tipo. En aquellos tiempos era como de caché hablar de temas socialistas y criticar el imperialismo impulsado por los EE UU.

El juicio se ha hecho y se está haciendo. Mario Vargas Llosa, un tiempo muy afín a Castro y después muy crítico, manifiesta que difícilmente el juicio será favorable. El mismo Rius que escribió Cuba Libre luego escribió, Lástima de Cuba y sin duda muchos de los que alababan el modelo después han ido reconociendo el fracaso del mismo modelo. No falta quien lo atribuya al bloqueo de decretó Estados Unidos y que según algunos propició el ahogamiento de Cuba. Hay quienes hablan del sistema que impedía el ejercicio de la libertad en muchos aspectos para la gente de la isla.

Hay hechos que pueden hablar por sí mismos como la deserción de muchos deportistas, músicos, intelectuales, etc., que aprovechaban alguna salida de la isla para pedir asilo y evitar regresar a Cuba. Conocí en 1993 a una delegación cubana de deportistas que se preparaban en Alemania para las olimpiadas, ahí conocí al gran Javier Sotomayor, y con tristeza constaté la vigilancia a la que estaban sometidos para evitar alguna fuga. Sea el juicio que cada uno dé difícilmente será objetivo porque todo juicio es subjetivo pero cada uno dará su propia verdad y ya el lector hará su propio juicio. Yo creo que Fidel Castro es un personaje referente del siglo XX, con muchas cosas valiosas y venerado por muchísima gente cubana y reconocido por muchos en todo el mundo pero también, alguien que como todos los líderes cometió errores según yo graves como el perpetuarse en el poder y no permitir el tránsito de Cuba a una democracia donde se respeten las libertades básicas de toda democracia, tránsito, religión, voto libre, trabajo, entre otras.