“Tlapa” dance
25 de octubre - 2016

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El líder del 7 de mayo pretendió burlarse de sus agremiados con eso de que “el fin justifica los medios”, al convertir el auditorio del sindicato “Justo Sierra” en centro nocturno. Una vez más llama la atención la doble moral de la diputada perredista Jiménez. Finalmente la administración de Adolfo Escobar ganó un asalto en la pelea por la alberca municipal

Por Edgardo Cabrera

Edgar Tlapale Ramírez puso en práctica eso de que “el fin justifica los medios”, luego de que el viernes convirtiera el auditorio del sindicato de trabajadores de la educación “Justo Sierra” en centro nocturno.

El secretario general del sindicato de trabajadores burócratas “7 de Mayo”, no tuvo el menor empacho en obligar a sus agremiados a comprar boletos para el espectáculo, según él, que servirá para financiar la construcción de una clínica de especialidades.

Y son varias las dudas que nos surgen al respecto, las principales: ¿no estamos acaso ante un claro caso de trata de personas con fines de explotación sexual? y ¿qué hicieron las instancias encargadas de la procuración de justicia al respecto?

No perdamos de vista que el “Tapla Dance” se realizó por la tarde y en un auditorio ubicado a unos cuantos metros de las instalaciones de la PGR y de la PGJE, también ahí muy cerca está el centro de inteligencia en materia de seguridad.

Ahora entendemos porqué muchos delincuentes que actúan en el estado lo hacen sin el menor empacho, ya vimos que en sus narices se cometen y complacen conductas al margen de la ley.

Pero no sólo lo anterior genera dudas y preguntas, también se ignora quién le otorgó el permiso a Edgar Tlapale y su sindicato para organizar un acto en donde, hasta donde sabemos, se «rifaron» bailes sensuales privados a los agremiados.

Lo peor del caso es que si el argumento fue recabar recursos con una tarifa de 150 pesos por boleto, es iluso imaginar que alcancen 150 mil pesos (considerando que supuestamente fueron mil los boletos vendidos entre los varones sindicalizados) para construir o equipar una clínica de salud por lo que el “fin” no justificó el medio.

¿Consternada?

Llama la atención la doble moral de la diputada perredista Eréndira Jiménez, que a colación de la fiestecita organizada por el líder del Sindicato 7 de Mayo, se mostró consternada y criticó dicho acto “en un estado estigmatizado por el tema de la trata de personas”, publicó en su cuenta de Fecebook.

No sólo lo anterior, cuestionó a las mujeres que tienen cargos en ese gremio porque toleraron el “acto denigrante del dirigente”, al tiempo que demandó respeto a los derechos humanos.

El problema es que hace unos días la diputada fue balconeada en redes sociales por estacionar su camioneta de lujo en un lugar exclusivo para discapacitados en el centro comercial Gran Patio: ¿eso no es violar también los derechos humanos de ese sector vulnerable de la población?

A la fecha no ha dicho ni pío de eso, menos ha pedido disculpas a la comunidad que padece de algún impedimento físico.

Segundo raund

Finalmente la administración de Adolfo Escobar ganó un asalto en la pelea que mantiene con los supuestos propietarios del predio donde únicamente se construyó la alberca municipal y que pomposamente denominan “Polideportivo Carlos Castillo Peraza”.

Resulta que un juez federal le concedió la suspensión definitiva de la orden emitida por la juez Segundo Civil del Distrito de Hidalgo, María Esther Juanita Munguía Herrera, mediante la cual sería demolido el inmueble.

El amparo le da un respiro al ayuntamiento, sin embargo el litigio sigue con Ismael Pérez Santacruz además con otros 3 particulares que también han reclamado la propiedad, por lo que todavía veremos más capítulos de esta novela.

No perdamos de vista que también se litigan las facultades que se le concedieron al alcalde para representar legalmente al ayuntamiento ante la negativa de la síndico para promover los recursos correspondientes por el caso del Polideportivo, amén de que existen denuncias del orden penal promovidas en contra del presidentes municipal y su director de obras.

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