Desde julio que llegó a Tlaxcala el hijo de AMLO las cosas poco han cambiado en Morena, a este paso Gonzalo López tendrá un partido solo con fachada, carente de estructura y con oportunistas personajes. Entre los lorenistas de nueva cuenta crece el nerviosismo ya que se rumora que esta misma semana saldrán todas las impugnaciones

Por Edgardo Cabrera

Desde julio que llegó a Tlaxcala Gonzalo López Beltrán las cosas poco han cambiado en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), quizá el único ajuste relevante fue impedir que la ex candidata perdedora a la gubernatura, Martha Palafox, siguiera metiendo sus manos en el partido.

El hijo de Andrés Manuel López Obrador ha preferido mantenerse de bajo perfil, incluso esa fue la indicación que le dio a sus huestes, ya que quiere evitar cuestionamientos por su imposición como delegado especial del partido de su papá.

Pero el sigilo con el que se conduce nada más no ha ayudado en nada para fortalecer la estructura y cohesión en Morena, por el contrario, algunos personajes han tomado gran fuerza gracias a su lambisconería con el junior que viene ocasionalmente a Tlaxcala.

Uno de ellos es el ex-priísta Joel Molina quien funge como administrador general del partido, posición que obtuvo gracias a que le coordinó la campaña a Martha Palafox.

Ahora, a 3 meses de la elección, dicen que Molina rompió años de amistad con la senadora y le dio la espalda ya que durante el proceso electoral tuvieron constantes diferencias, incluso terminó peleado con uno de los hijos de Palafox tras ser relegado en la campaña.

Ya sin los Palafox metidos en Morena, Joel Molina Ramírez no se le despega al hijo de AMLO, dicen que en espera de ser premiado con una candidatura, al menos por la senaduría.

Otro caso es el de Isela Rojas Amador, la ex directora de Desarrollo Comunitario y Pueblos Indígenas del Sepuede en los sexenios de Héctor Ortiz y Mariano González Zarur.

Nombrada delegada por el distrito II se ha dedicado a endulzarle el oído y el paladar al pejecito, bueno, la han visto hasta llevándole chiles en nogada.

Eso sí, al interior del partido y del distrito existe gran desconfianza y enojo con la ex orticista dado que carece de estructura y, por el contrario, ha provocado diferencias con los morenos capitalinos, uno de ellos el regidor electo, Víctor García Lozano.

Y es que quienes la conocen aseguran que doña Isela pretende ser candidata en las elecciones del 2018, incluso considerada dentro de la lista plurinominal.

A este paso Gonzalo López Beltrán tendrá un partido solo con fachada, carente de estructura y con personajes que esperan el milagro de san Peje para acceder a cargos de representación popular gracias a los votos del tabasqueño.

Nerviosismo

Entre los lorenistas de nueva cuenta crece el nerviosismo ya que se rumora que esta misma semana podrían ser desahogados todos los expedientes relacionados con la impugnación de la elección de gobernador.

Como muestra, ayer difundieron un documento que data desde el pasado 13 de septiembre y mediante el cual la Fepade admite la solicitud de Lorena Cuéllar para que se le considere como agraviada en la indagatoria que promovió por violencia política de género.

El hecho es que el citado documento no es ninguna sentencia, como trataron de hacerlo ver, forma parte de un largo procedimiento del cual también se defienden los acusados por Cuéllar.

Por lo pronto lo que queda claro es que este semana veremos a los lorenistas más activos en espera de meterle ruido y presión a los fallos que se esperan emitan los magistrados a favor del priísta Marco Mena.

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